Es muy sencillo aguantar una apuesta perdida cuando el
jugador lleva una racha de picks acertados muy buena. Lo que viene al cerebro
es: "bueno, algún día tenía que perder" o "no pasa nada, sigo
con buenos beneficios". Se acepta.
El problema aparece cuando el jugador atraviesa una mala racha. Ese apostador, aunque un poco con la mosca detrás de la oreja, no se
amilana y sigue buscando buenas apuestas en las que invertir. Imaginemos que ese
jugador metódico ha encontrado una apuesta de gran valor en un partido de
futbol y entra con un stake elevado. Como hemos hablado en otros momentos, la disciplina es seguramente, la cualidad más importante del tipster, aunque también la más dificil de adquirir.
Minuto 95, el árbitro está a punto de pitar el final del
encuentro cuando se acabe la jugada y el resultado es perfecto para nuestra
apuesta, siempre que no se mueva el marcador.
Lamentablemente, ocurre lo que aparece en este gif y
acto seguido acaba el partido, dejándonos cara a la pantalla con ojos como
platos.
Es muy probable que, tras encadenar una racha de rojos, esta
sea la gota que colma el vaso y la sangre fría de ese jugador haya
desaparecido. Desde insultos a la patética defensa del equipo hasta
autocompasión pasando por todas las fases posibles. Lo ideal es que hubiera un
saco de boxeo cerca para desahogarse, aunque en este caso la pantalla del
ordenador/televisión también podría servir.
Es en estos peligrosos casos cuando la gente se arruina.
Eso es terrible. Si como hemos dicho el jugador tiene un
nivel razonable como tipster y realmente en una de esas apuestas recupera el
dinero se va a sentir muy decepcionado con él mismo, sabiendo que ha estado
jugándose el trabajo de mucho tiempo en unas pocas apuestas. Si por otro lado
sus apuestas no salen bien el resultado es, además de sentirse decepcionado con
él mismo, la más miserable de las ruinas. Demasiado precio a pagar en ambos
casos.
En poker, este estado tiene el nombre de Tilt, que significa
"un estado de confusión mental o la frustración que resulta luego de que
un jugador adopta una estrategia no favorable que finalmente torna su conducta
cada vez más agresiva. Llegar al Tilt es un hecho relativamente frecuente
debido a la frustración, la animosidad contra otros jugadores o simplemente la mala suerte tras algunas manos malas", como la wikipedia indica.
Para evitar este impulso que todos tenemos yo utilizo una
especie de autosugestión. Cuando pierdo una apuesta en la que tenía mucha
confianza o tengo una racha terrible la primera palabra que me viene a la
cabeza es "paciencia", después la frase "hay que seguir
igual" y por último recuerdo las rachas positivas que he tenido y que,
afortunadamente, han sido mayores que las negativas, por lo que acto seguido me
viene la frase "si considero todo esto, este bache no es tan
desastroso".
No me avergüenza reconocer que hace ya tiempo me costaba
mucho mantener la sangre fría ante una sucesión prolongada de resultados
desastrosos, pero sí es cierto que a medida que me acostumbré a perder tanto
como a ganar y con ayuda de este método cutrillo de autosugestión he mejorado
en ese sentido enormemente hasta el punto que una racha terrible de resultados
negativos no deja de ser para mi cerebro un pequeño bache sin importancia.
Cosas de la caprichosa varianza. Y es que eso de la autosugestión funciona.
Estoy muy interesado en saber cuáles son vuestros métodos de
autosugestión y similares, tanto en apuestas como en cualquier ámbito. Tanto
los comentarios como mi correo están disponibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario